Evolución de los Bancos Más Antiguos de Chile desde el Siglo XIX
La evolución del sistema bancario en Chile desde el siglo XIX ha estado marcada por la adaptación a cambios económicos y sociales, comenzando con la creación del primer banco en 1848 y consolidándose con la Ley General de Bancos en 1860, hasta llegar a la actual alta concentración y extranjerización del sector que se intensificó tras las privatizaciones y fusiones a partir de los años 80.

La historia del sistema bancario en Chile es un testimonio de la transformación económica y social que ha vivido el país a lo largo de los años. Desde sus inicios en el siglo XIX hasta el robusto sistema financiero actual, los bancos han desempeñado un papel fundamental, adaptándose constantemente a los cambios. A continuación, se exploran los orígenes y el desarrollo de los bancos más antiguos de Chile.
Los Primeros Pasos: El Siglo XIX y la Ley de 1860
El Banco de Arcos y Cía., fundado en 1848, se considera el primer banco registrado en Chile, aunque su existencia fue efímera. El verdadero avance para la banca chilena se dio con la promulgación de la Ley General de Bancos en 1860. Esta legislación, influida por las ideas liberales del economista francés Gustavo Courcelle Seneuil, estableció el marco legal que permitió a los bancos privados operar y emitir dinero, una función que se mantendría hasta la creación del Banco Central en 1925.
Durante este periodo, surgieron instituciones clave que sentaron las bases del sistema bancario:
Lee también
Banco de Valparaíso (1855): Considerado el segundo banco legalmente constituido y el primero en mostrar permanencia y estabilidad.
Banco de Concepción (1871): Surge como una de las primeras instituciones regionales en el proceso de expansión bancaria.
Banco BHIF (1883): Fundado en esta etapa emergente.
Banco de A. Edwards (1892): Fundado por Agustín Edwards, se destacó como uno de los bancos más grandes e influyentes a finales del siglo XIX, junto con el Nacional de Chile y el de Valparaíso.
Banco de Chile (1894): Nació de la fusión de otros bancos y rápidamente se consolidó como uno de los principales actores del sector.
Banco Osorno y La Unión (1908): Un ejemplo de lo que fue la banca regional en los inicios del siglo XX.
Inicialmente, estos bancos se dedicaron a captar y colocar capital financiero, aunque su impacto en sectores productivos como la agricultura y la industria manufacturera fue limitado. La economía de esa época estaba marcada por la especulación, y los créditos se dirigían principalmente a operaciones a corto plazo, desatendiendo proyectos de largo aliento.
Consolidación y Regulación: La Creación del Banco Central
Las crisis monetarias recurrentes y la alta inflación, que comenzaron en 1878, evidenciaron la necesidad de una entidad que regulara el sistema financiero. Tras la llegada de la misión Kemmerer, compuesta por expertos estadounidenses, se implementaron medidas clave en 1925:
Creación del Banco Central de Chile: Fundado el 22 de agosto de 1925, se estableció como el único emisor de moneda en el país.
Establecimiento de la Superintendencia de Bancos: Encargada de supervisar y fiscalizar el sistema bancario.
Aprobación de la Ley Monetaria: Se introdujo un patrón oro, aunque su duración se vio afectada por la crisis de 1929.
Estas reformas lograron una consolidación del sistema bancario chileno. En las décadas posteriores, se fundaron nuevas instituciones como el Banco de Crédito e Inversiones (BCI) en 1937 y el Banco Sudamericano en 1944. En 1953, varias cajas de ahorro y crédito se fusionaron para constituir el Banco del Estado de Chile, considerado vital para promover el ahorro y el acceso a servicios financieros para toda la población.
Transformaciones Profundas: Privatizaciones, Crisis y Fusiones
La segunda mitad del siglo XX marcó un período de cambios drásticos para el sistema bancario en Chile:
Estatización (1970-1973): Durante el mandato de Salvador Allende, gran parte del sector bancario fue nacionalizado, llegando el Estado a controlar hasta el 85% del sector financiero.
Primera Privatización (1975-1976): Tras el golpe militar de 1973, comenzó un proceso acelerado de privatización, en un contexto de severa recesión y regulación deficiente, lo que resultó en una concentración de la propiedad en unos pocos grupos económicos y preparó el terreno para futuras crisis.
Crisis de los ochenta: A principios de la década de 1980, una crisis económica severa afectó a Chile, colapsando el sistema bancario. La cartera de préstamos de mala calidad superó el 200% del capital de los bancos, lo que llevó al Estado a intervenir 14 entidades y liquidar otras 6. La mayoría de los bancos privatizados volvieron a ser controlados por el Estado.
Segunda Privatización y "Capitalismo Popular": A partir de 1985, se inició una nueva ronda de privatizaciones, respaldada por una nueva Ley de Bancos (1986) que mejoró la regulación y supervisión. A través del mecanismo del "capitalismo popular", se buscaron reprivatizar los bancos más grandes, como el Banco de Chile y el Banco de Santiago, promoviendo una mayor dispersión de la propiedad.
La Era de las Fusiones y la Extranjerización
Desde la década de 1990, el sistema bancario chileno ha estado caracterizado por una alta concentración debido a fusiones. Este proceso ha reconfigurado el panorama bancario, destacándose las siguientes fusiones:
Banco Osorno con Santander (1996).
Banco O'Higgins con Santiago (1997).
Banco de A. Edwards con Banco de Chile (2001).
Banco Santiago con Santander (2002), formando uno de los grupos financieros más grandes del país.
Este fenómeno ha propiciado una creciente inversión de capitales extranjeros. En la actualidad, de los 25 bancos que operaban en 2001, solo una minoría permanece bajo control nacional, mientras que conglomerados internacionales, como los españoles BSCH y BBVA, han adquirido un papel protagónico. El Banco del Estado se mantiene como el único banco de propiedad estatal.
La evolución del sistema bancario en Chile es un reflejo de la historia económica del país, que ha transitado de un inicio caracterizado por la especulación a una fase de consolidación regulatoria, atravesando profundas crisis y un proceso de privatización que ha culminado en un sistema altamente concentrado y globalizado.
Para más actualizaciones y análisis sobre temas económicos y financieros de Chile y el mundo, siga leyendo en Liven.
¿Te gustó esta noticia?
Mantente informado con las últimas noticias de Chile y el mundo.